Esta actividad que congrega no solo a campesinos de este sector del Meta, sino a miles de turistas que vienen desde diferentes lugares del país tiene desde hace 14 años un atractivo que se ha vuelto uno de los más importantes de esta celebración. El desfile de carretilleros, una tradición llena de color y sabor de los productos cultiuvados en este municipio, que durante décadas fue golpeado por la violencia.
En esta versión participaron más de 40 carretillas en dos categorías: la urbana, que tenía como temática los mitos y leyendas del Llano embrujador; y la rural, que agrupó aquellas que representaban la vocación agrícola de su territorio productivo.
Los carretilleritos
Para Camila Arismendi, directora del Instituto Departamental de Cultura del Meta (IDCM), este es uno de los atractivos más importantes que tiene el festival, esto porque permite que los niños y niñas puedan asumir su rol como gestores agrícolas y herederos de la tradición de sus ancestros.
"Estos niños y niñas, asumen la construcción de sus carretillas con mucho compromiso y cuentan con el acompañamiento de sus padres y familiares y han visto en esta actividad una posicilidad de mostrar los productos de su tierra", aseveró la funcionaria.
Durante dos horas, los agricultores desfilaron por las calles de Lejanías con sus obras que tienen por materia prima lo que su tierra fértil produce en cada una de sus fincas, para una composición de 30% granos, y 70% frutas.
En el año 2020, las carretillas frutícolas fueron incluidas en la Lista Representativa de Patrimonio Cultural Inmaterial del Ámbito Departamental, mediante la resolución N° 2291, y según explicó Camila Arismendy, directora del IDCM, actualmente la entidad cultural, junto con la comunidad, van a radicar el documento de postulación para que las carretillas sean incluidas Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de Colombia.
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