Así funciona la nueva Ley contra la contaminación acústica

El Gobierno nacional sancionó la Ley 2450 del 4 de marzo de 2025, una normativa que busca reducir la contaminación acústica en Colombia y establecer medidas para garantizar un entorno sonoro saludable en ciudades y municipios del país. La ley fue publicada en la página oficial de la Presidencia de Colombia y cuenta con la firma de varios funcionarios del orden nacional, entre ellos los ministros de Salud, Educación, Ambiente, Vivienda, Transporte, Cultura y Defensa, quienes desempeñarán un papel clave en su ejecución.  

La norma, impulsada por el representante a la Cámara Daniel Carvalho, tiene como propósito principal reducir los efectos negativos del ruido ambiental en la salud pública. En ese sentido, los ministerios de Ambiente, Salud y Vivienda tendrán 18 meses para actualizar la reglamentación sobre contaminación acústica y definir nuevos parámetros de confort y aislamiento acústico.  

La ley también ordena la creación de indicadores de calidad acústica, mapas de ruido y metodologías para medir los niveles sonoros en el país. Además, el Ministerio de Salud deberá realizar estudios sobre el impacto del ruido en la salud y los costos que este problema genera en el sistema de salud pública.  

Multas y sanciones por exceso de ruido

Uno de los puntos más relevantes de la ley es la obligación de los municipios con más de 100.000 habitantes de desarrollar un plan de gestión contra el ruido, el cual debe incluir un diagnóstico de las principales fuentes de contaminación acústica y estrategias para mitigar su impacto.  

En cuanto a sanciones, la normativa establece multas que van desde dos hasta 800 salarios mínimos mensuales legales vigentes (más de $1.135 millones de pesos) para quienes incumplan los límites de ruido permitidos. Estas sanciones aplicarán especialmente para eventos masivos con más de 5.000 asistentes que no cumplan con las regulaciones establecidas.  

El representante Daniel Carvalho, autor de la iniciativa, explicó que la ley busca regular el ruido excesivo en espacios públicos sin afectar actividades comunitarias:  

“No hay problema si una vecindad quiere hacer una fiesta. El problema es que un solo vecino saque un parlante y afecte la calma de todo un barrio. Es muy diferente una fiesta colectiva, concertada, a dos personas en una esquina con un parlante sin dejar dormir a la gente”, señaló el congresista.  

Enfoque educativo y experiencias internacionales

Además de las sanciones económicas, la ley promueve un enfoque educativo y cultural para concienciar a la ciudadanía sobre el impacto del ruido ambiental en la salud. Se desarrollarán campañas de sensibilización dirigidas a reducir las fuentes de ruido y mejorar la convivencia en el espacio público.  

Con esta nueva normativa, Colombia se suma a países como Bolivia, Chile, Ecuador y España, que han implementado leyes para regular la contaminación sonora y proteger la salud pública y el medio ambiente.