Huertas caseras: alternativa de sustento para mujeres cuidadoras en Granada, Meta

En el municipio de Granada, Meta, la fundación Fumidi, liderada por Solains Valbuena Peralta, ha encontrado en la agricultura urbana una herramienta de sustento, terapia y empoderamiento para mujeres dedicadas al cuidado de personas con discapacidad. A través de las huertas caseras, parte de los Proyectos Ciudadanos de Educación Ambiental (Procedas) de Cormacarena, han logrado generar ingresos y garantizar seguridad alimentaria para sus familias.  

Valbuena Peralta, de 39 años, sufrió un trauma craneoencefálico severo y una fractura en su pierna izquierda hace 14 años en un accidente de tránsito. Desde entonces, su vida cambió radicalmente, impulsándola a crear esta fundación, que hoy está conformada por cinco mujeres que enfrentan la doble responsabilidad de ser cuidadoras y proveedoras de sus hogares.  

"En mi grupo familiar somos tres personas con discapacidad: mi madre, quien padece enfermedades huérfanas; mi hijo, con dificultades de aprendizaje; y yo. A raíz de esto, comencé a indagar sobre educación, salud, medio ambiente y temas sociales, trabajando de la mano con la institucionalidad y la población con discapacidad", afirmó Valbuena Peralta.  

Gracias a las huertas caseras impulsadas por Cormacarena, las mujeres de Fumidi han encontrado una alternativa de trabajo que les permite administrar su tiempo sin descuidar su rol de cuidadoras. Además de ser una terapia ocupacional, estas cosechas les garantizan autoabastecimiento alimentario y una fuente de ingresos mediante la venta de sus productos.  

La corporación ha extendido la invitación a más personas interesadas en vincularse a los Procedas y otros proyectos ambientales. Las inscripciones estarán abiertas hasta el 25 de abril de 2025 a través de las redes sociales oficiales de @Cormacarena.  

En lo que va del 2024, Cormacarena ha respaldado 107 Proyectos Ambientales Escolares (Praes), 22 Procedas, 30 Comités Técnicos Interinstitucionales de Educación Ambiental (Cideas) y 3 grupos juveniles, fortaleciendo sus capacidades y promoviendo la protección del medio ambiente en el Meta.  

Con estas iniciativas, la entidad continúa fomentando la educación ambiental y la inclusión de poblaciones vulnerables, destacando la participación de madres cuidadoras, personas con discapacidad, estudiantes y comunidades comprometidas con la conservación del entorno.